Cuando llegan las vacaciones y los días libres, el destino preferido es, en general, la playa. Y no es de extrañar, un destino de playa es un destino para todos: para los más pequeños, para los mayores, para los que buscan turismo activo, etc. Sin embargo; no debemos olvidar nunca que la seguridad es muy importante. Quizá, con la llegada de las vacaciones y la ilusión, la seguridad es un aspecto ante el que nos relajamos y muchas veces no tomamos lo suficientemente en serio.
Para evitar malas experiencias, hoy te damos algunos consejos para que tus vacaciones en la playa sean unas vacaciones seguras y sólo las puedas recordar por lo bueno. Toma nota:
- Pasar un día de playa implica, inevitablemente, pasar muchas horas expuestos al sol. Y los riesgos los conocemos todos, por eso, como primera medida de seguridad, asegúrate de protegerte y proteger a tu familia del sol. Para ello, evita las horas de máxima radiación solar (entre las 11:00h y las 16:00h) y de protegerte con crema de protección solar.
- Para evitar la deshidratación, es importante tomar líquido abundante mientras se está expuesto al sol. Lo más recomendable es el agua y lo que nunca se debe tomar son bebidas alcohólicas, ya que favorecen la deshidratación.
- Prestar atención a las banderas y respetar las prohibiciones específicas de cada playa.
- Para los que viajan con niños, es evidente que hay que estar siempre muy pendientes de todos los movimientos de los pequeños. Y si cuentan con juguetes inflables (colchonetas, barcas, etc.), los pequeños sólo deben utilizarlos bajo la supervisión de un adulto.
- saltar al agua desde, especialmente desde lugares con cierta altura, debe evitarse siempre. De haber rocas o una poca profundidad, por ejemplo, las consecuencias físicas pueden ser muy graves.
¡Asegúrate de que tus vacaciones en la playa sean seguras!