En 1962, Edwart James, escritor y mecenas, perteneciente a una familia adinerada, llegó a México y conoció un pueblo llamado Xilitla, un municipio ubicado en San Luis de Potosí. El excéntrico inglés, se enamoró enseguida del lugar, donde decidió llevar a cabo un delirante proyecto.
Amigo de artistas como Picasso, Dalí, René Magritte o Buñuel, James estuvo vinculado al movimiento surrealista. Las Pozas de Xilitla fueron el entorno perfecto donde dar rienda suelta a sus extravagantes fantasías.
La selva fue el entorno perfecto para su jardín secreto, como vestigios de una civilización perdida, dispuso restos arquitectónicos al estilo de culturas del pasado, como la egipcia o la mesopotámica; elementos góticos, estructuras inacabadas, jaulas gigantes, arcos invertidos…una especie de País de las Maravillas en el que dio rienda suelta a la imaginación.
Todos los elementos emergen en una vegetación exuberante, agreste, ocupando un espacio de casi 40 hectáreas que el inglés compra cuando se traslada a México huyendo de su desaforada vida por los ambientes intelectuales de Europa y Norte América, y de los horrores de la II Guerra Mundial, junto a Plutarco Gastélum, el que fuera su socio hasta el final de sus días.
Las soluciones arquitectónicas que pueblan el jardín son elementos muchas veces inacabados de manera intencionada: escaleras que ascienden a ningún sitio, puertas que no cierran ni dan paso a ningún espacio concreto… Las paredes, las estancias, los techos, la estructura que sustenta sus oníricos elementos constructivos, consisten en la propia selva.
La Casa de los Peristilos, el Templo de las Dos Columnas, la Escalera al cielo o la Estructura de tres pisos que pueden ser cinco, son algunas de las construcciones más emblemáticas de Las Pozas.
En este capricho surrealista que fue creando a lo largo de 20 años, contó con la ayuda de la ayuda del arquitecto Carmelo Muñoz Camacho y del tallador José Aguilar, quien daba forma a los bocetos y dibujos de James. El vivió hasta su muerte en El Castillo, una construcción en estilo gótico dentro del complejo.
Queremos agradecer tan completa nota y los invitamos a conocer más de el trabajo de la Fundación Pedro y Elena Hernández la cual se dedica a resguarda y conservar el Jardín escultorico de Edward James. http://www.laspozasxilitla.org.mx