Hace un tiempo os hablamos de un pequeño pueblo de la región del Costwolds, en Inglaterra, llamado Castle Combe.
Hoy os vamos a presentar otra joyita de esta zona rural de campiña de la zona Centro – Sur del país. Se trata de Bibury, en el condado de Gloucestershire.
Esta aldea encantadora parece salida de un viejo óleo donde rudas pinceladas, pincelan las fachadas que integran el conjunto.
Tejados a dos aguas sobre los que destacan puntiagudas buhardillas y toscas chimeneas, respetando una única tipología constructiva.
Las viviendas se funden con la naturaleza, ya que las fachadas están revestidas de frondosas enredaderas, plantas y flores crecen a los pies de las fachadas, rosales trepadores decoran los muros de piedra y los árboles rodean todo el conjunto.
Aparecen alineadas, al margen del río Coln, afluente del rio Támesis, o sobre suaves colinas y tienen la peculiaridad de revelar puertas de una curiosa altura, menguada al asfaltar las calles y subir el nivel del suelo de las calles.
En el centro de Bibury se abre una pequeña plaza en la que se encuentra la iglesia sajona de Santa María, aunque cuenta con intervenciones medievales posteriores.
La aldea cuenta con una granja fundada en 1902 por el naturalista Arthur Severn, donde se cría cada año entre seis y 10 millones de truchas arcoíris, con el propósito de abastecer los arroyos de Costwolds.
Este pintoresco pueblo que recibe cada año a numerosos turistas fue nombrado uno de los pueblos más hermosos de Inglaterra por el poeta William Morris.