Argentat es una pequeña comuna situada en el corazón de Francia, en el departamento de Corrèze, en la región de Lemosín, que actualmente se ha fusionado con las de Aquitania y Poitou – Charentes.
La pequeña aldea de Argentat conserva toda la belleza de las villas del siglo XVII, con sus tejados de pizarra y torres pinaculares, flanqueando los márgenes del río Dordoña, en dos barrios que se unen a través de un estrecho puente de tres arcos.
La presencia del río, posibilitó en la villa un fecundo comercio fluvial, a través del cual, enviaban sus productos ganaderos y forestales, como las pieles, los lácteos y la madera, a las ciudades de Burdeos o Bergerac, además de contar con una de las ferias más importantes de toda la región.
En la actualidad, el principal recurso económico de Argentat es el turismo, actividad con la que se ha volcado la mayor parte de su población, estableciendo asociaciones que se dedican a diferentes ocupaciones, como la de los establecimientos hosteleros, las visitas guiadas por lugares cercanos, los paseos en gabarras, o embarcaciones comerciales tradicionales, amenizados por las canciones de sus marineros, y multitud de actividades relacionadas con la naturaleza, etc.
Argentat cuenta además con una sala de exposiciones permanente y con un centro acuático, donde se llevan a cabo deportes naúticos.
Durante los meses de verano, se celebran numerosos festivales de música tradicional, celta o Jazz.