Jaipur es la capital del estado de Rajasthan, al noroeste de la India. Fundada en el año 1728 por el maharajá Jai Singh II, cuenta con una casco antiguo que se caracteriza por el color de sus edificios: el rosa asalmonado, desde que a finales del siglo XIX, se pintaran de esta tonalidad los estucos de las paredes para dar la bienvenida al príncipe Alberto de Gales. El color rosa simboliza buena suerte den la India, por lo que decidió dejarse esta coloración en los edificios como símbolo de hospitalidad de Jaipur.
Al ser una ciudad de reciente creación, es una de las pocas planificadas de la India, siguiendo un antiguo tratado de arquitectura hindú llamado Shilpa Sastra. Toda la ciudad antigua está amurallada, cuenta con diez puertas de entrada y nueve barrios rectangulares que representan las nueve partes del Universo.
Cuenta con una arquitectura majestuosa y exuberantes jardines. Ejemplos de ellos son el Palacio de los Vientos o Hawa Mahal, con una espectacular fachada en arenisca rosa de cinco pisos y 953 ventanas que miran a la calle. El edificio fue diseñado para permitir a las mujeres de la corte del maharajá Sawai Jai Singh seguir los acontecimientos que transcurrían al exterior del palacio, de donde no se les permitía salir.
El Palacio de la Ciudad y el Chandra Mahal es un complejo de diversas construcciones y jardines que ocupa una amplia área de la ciudad. Fue construido en 1729 y su puerta de entrada está formada por un paso jalonado por tres arcos y una estructura de dos pisos sobre la que se dispone una zona aterrazada. En el interior, se disponen edificios realizados en rosa y blanco, donde se instalan tiendas, un museo y el Chandra Mahal, o vivienda de la familia del actual Maharajá de Jaipur.
Otro lugar singular de Jaipur es el observatorio astronómico de Jai Singh, mandado construir por Jai Singh II, gran amante de la Astronomía. Se trata de un espacio ajardinado en el que se disponen extrañas construcciones y estructuras que sostenían gigantescos instrumentos astronómicos.
A las afueras de Jaipur, apenas a 11 kilómetros de distancia, se encuentra el Fuerte Amber. Emplazada sobre una colina, la fortificación fue construida a finales del siglo XVI por el clan de los Kachwaha, que reinaron en Amber antes de trasladarse a Jaipur. Al exterior, es una estructura amurallada jalonada por torres vigía. En el interior, un patio da cobijo a diferentes construcciones, como un templo y otros palacios. El lujo y la decoración ostentosa son característicos de los Kachwaha, por lo que decoran el interior de sus edificios con mármoles, relieves, pinturas, espejos y piedras preciosas.
El fuerte se refleja en un lago que se encuentra bajo la colina, en el que se puede admirar un palacio sobre el agua llamado Jal Mahal.
