La caverna de Hang Son Doong se encuentra en Asia, ubicada dentro del parque nacional de Phong Nha-Ke Bang, cerca de la frontera entre Vietnam y Laos, que es uno de las zonas kársticas más grandes del planeta y alberga más de 300 cuevas.
Todo el subsuelo del parque es una zona de pasaje de corrientes subterráneas que han dado lugar a formaciones increíbles de estalactitas y estalagmitas gigantescas.
En el año 2009, un grupo de exploradores británicos descubrieron la cueva de Hang Son Doong con la ayuda de los lugareños y, hasta el momento, es considerada la más grande del mundo.
Su sala de mayor tamaño tiene una profundidad superior a los 5,5 kilómetros, 150 metros de anchura y aproximadamente 200 de altura. Un río subterráneo la recorre y se pierde en la profundidad de la roca.
En el interior de la cueva, hay paredes cubiertas de helechos y plantas tropicales trepadoras.
En una parte del corredor, conocido como El jardín del Edam, parte del techo de la caverna se desprendió y la entrada de luz y lluvia propició el crecimiento de una vegetación exuberante entre la que merodean multitud de vencejos y otras aves valientes.
Inmensos bloques de caliza y cortinas de estalactitas gigantes, suelos de extrañas formas serpenteantes, una laguna gigante y hasta un tesoro de pisolitas o perlas de las cavernas, –formadas por la capa de arena cálcica que se va formando cuando una gota de agua cae del techo, a lo largo de miles de años-, son algunas de las maravillas que esconde Hang Son Doong, muchas de las cuales, todavía están por descubrir.
