Si no te gusta la playa, ni los chiringuitos, ni ver a la gente en pareo por la calle, quizás tengas que elegir alguno de los cinco pueblos de interior que te ofrecemos para perderte este verano.
Maderuelo es ubica en Segovia y es uno de los pueblos con encanto más hermosos de Castilla y León. Entre sus casas de piedra y madera, podrás encontrar casas rurales para alojarte y transportarte visualmente diez siglos atrás.
El pantano de Linares, a sus pies donde podrás refrescarte y practicar deportes acuáticos y su mercado medieval, son los mejores atractivos para elegirlo como destino.
Pozán de Vero está situado en Huesca, en la ladera de un valle de la comarca de Sotomanto de Barbastro. Además de su hermoso patrimonio, cuenta con una presa de agua conocida como el Salto de Pozán, donde podrás refrescarte en las aguas del río Vero.
Cirat, en el interior de Castellón, es un pequeño municipio de la comarca del Alto Mijares, enclavado en un paisaje abrupto rodeado de bosques de pino y saltos de agua, ideales para practicar senderismo y tomar un baño refrescante. Además, cuenta con un interesante conjunto de Bienes de Interés Cultural.
Zorita de los Canes es uno de esos lugares privilegiados que no te arrepentirás de visitar. Situado en uno de los márgenes del río Tajo, cuenta con un castillo de origen almorávide y necrópolis visigoda. Las posibilidades de ocio en torno al río y el atractivo de su comarca, La Alcarria, lo convierten en un lugar privilegiado.
Campdevànol se encuentra en Girona, en la comarca del Ripollés, rodeado de montañas y con el atractivo natural de los siete gorgs, o saltos de agua, un itinerario natural conocido como Torrent de la Cabana, que cuenta con siete cascadas o saltos de agua en los que podrás bañarte y disfrutar de la naturaleza.