Hay unas escaleras en la isla de Oahu, en Hawái, que se conocen como las escaleras del cielo. Las Haiku Stairs salvan los casi 1.000 metros de altura que separan el valle de Haiku de la cima de Pu’u Keahi A Kahoe, siempre cubierta por las nubes.
Fueron construidas en 1942, durante la Guerra del Pacífico en la que Japón intentaba su expansión por China. El ejército norteamericano, aliado de China en la contienda, instala una estación de radio en una base situada en lo alto de Pu’u Keahi A Kahoe, con el fin de establecer comunicaciones entre el valle de Haiku y la flota submarina. Hoy en día, aún puede observarse la vieja caseta situada en la cima.
Se trata de una estrecha y sinuosa escalera con más de 3.900 escalones, que en un principio fueron construidos en madera por trabajadores de la isla. Con el tiempo, los peldaños de madera fueron sustituidos por plataformas y escalones metálicos, protegidos a ambos lados por barandillas.
En 1987, las Haiku Stairs fueron cerradas por seguridad, ya que su mantenimiento no se llevaba a cabo por el enorme gasto que suponía y la naturaleza se había abierto paso en muchas partes del trayecto, convirtiéndolo en inseguro y peligroso.
A pesar de los carteles que prohíben y advierten de los peligros de la escalera hacia el cielo, un gran número de turistas intrépidos se arriesgan a ascender por el sendero escalonado hasta coronar la cumbre del Pu’u Keahi A Kahoe. Provistos de guantes y botas de montaña, ascienden durante casi dos horas por los históricos peldaños oxidados, para conseguir disfrutar de unas vistas insuperables.