Mieders es una pequeña localidad tirolesa situada en el distrito de Innsbruck-Land, al suroeste de Austria.
Emplazada en un espacio privilegiado, a los pies del pico Serles y en el Valle del glacial Stubai, Mieders conserva el aspecto tradicional de los pueblos tradicionales tiroleses de origen granjero, donde sobresale la torre gótica de la Iglesia de la Natividad de María, con sus 53 metros de altura.
Sin embargo, el principal atractivo de este pequeño pueblo es lo que se conoce como “montaña rusa de los Alpes” o “el tobogán de verano”: Sommerrrodelbahn, un trineo sobre raíles, apto solo para valientes.
El trayecto comienza a una altura de casi 1650 metros, a donde se accede desde un teleférico. Durante el descenso de 650 metros en casi tres kilómetros de recorrido, alcanza una velocidad superior a los 40 km por hora, poniendo a prueba la adrenalina de sus ocupantes con más de 40 empinadas curvas y otros tantos desniveles.
El tobogán se desciende en pequeños vagones abiertos, que disponen de cinturón de seguridad y palanca de freno.
La atracción se abre al público solo durante los meses de buen tiempo, de mayo a octubre, de 9 a 17 horas aproximadamente, y su precio es de unos 10 euros por persona.