Hace unos días, hablamos de un bosque de cipreses sumergido en un lago de la Patagonia argentina.
Pues hoy vamos a conocer otro curioso lago, emplazado en un entorno natural inigualable. Se trata de Grüner See, un lago glacial situado en Tragöss, un municipio del estado de Estiria, en Austria.
Toda la región está cubierta por extensos bosques y verdes prados, un paraíso natural recogido entre montañas, que lo convierten en un destino idílico para los amantes del turismo de naturaleza.
El lago Grüner See o lago verde ha sido declarado como uno de los lugares más hermosos de Estiria. Con apenas un metro y medio de profundidad, sus aguas transparentes se tornan de color turquesa, como si reflejaran la tonalidad del paisaje en que se enmarcan. Sus aguas gélidas son a veces habitadas por alguna especie de trucha o de salmón, aunque no cuentan con una fauna fecunda.
La curiosidad de este lago radica en la crecida de su volumen justo después del deshielo, en primavera, cuando recoge las aguas de las cumbres vecinas y alcanza una profundidad de más de 12 metros. Es entonces cuando se produce un curioso fenómeno. La extensión del lago se multiplica abarcando las áreas cercanas, que durante el resto del año son un espacio para pasear y disfrutar del paisaje. Bancos, árboles, puentes y senderos quedan sumergidos bajo las aguas, convirtiéndose en un fascinante parque submarino que numerosos buceadores y fotógrafos aprovechan a visitar.
Cuando el verano se aproxima, las aguas comienzan a descender hasta alcanzar su nivel más bajo en los meses de invierno.
Grüner See se ha convertido en un lugar muy popular y visitado, por lo que en el año 2006 fue declarado Reserva Natural.