Aquadom es uno de los acuarios más peculiares y grandes del mundo. Se encuentra en Berlín, concretamente en el Hotel Radisson Blu, un lujoso establecimiento situado en el centro de Berlín, frente a la catedral y cerca de la Museumsinsel y la Alexanderplatz.
El Aquadom fue diseñado y construido en 2003, por la empresa Reynolds Polymer Technology. Tiene forma cilíndrica y un tamaño de 25 metros de altura por 12 de diámetro, y una capacidad de casi un millón de litros de agua marina.
En su interior viven más de 2.000 peces de 50 especies diferentes, además de una flora acuática que permite oxigenar el agua, evitar la formación de algas y proteger a las especies más vulnerables, entre ellas, vistosos peces payaso, globo, tiburones y otros peces exóticos.
De hecho, se espera que en su interior pueda desarrollarse un arrecife de coral artificial. Pero esta espectacular pecera requiere un mantenimiento diario que realizan tres buzos, encargados de limpiar el acuario y alimentar a sus habitantes con hasta 8 kg de comida.
El Aquadom, que costó más de 12 millones de euros es uno de los reclamos más importantes de este hotel. En su interior hay un ascensor que recorre los 25 metros de la pecera, que también puede disfrutarse desde cualquiera de las habitaciones cercanas, con un precio de 200 euros la noche, o tomando una copa desde los bares que rodean esta obra de arte.
Además, el Aquadom se puede contemplar desde un túnel que recorre la parte baja del depósito.