Holašovice es uno de los pueblos con mayor encanto de la República Checa
Holašovice es una pequeña población situada al suroeste de la República Checa, en la región de la Bohemia del sur.
Su origen data de la Edad Media, apareciendo referencias escritas de la villa que se remontan al siglo XIII.
Entre los hitos históricos más destacados de Holašovice destacan dos que terminaron prácticamente con toda la población. El primero fue una epidemia de peste, durante el siglo XVI, que necesitó de casi su completa repoblación. El otro fue la Segunda Guerra Mundial, ya que la población, formada por colonos alemanes, se anexionó al Reich. Tras la derrota alemana, abandonaron Holašovice. Las viviendas fueron ocupadas y restauradas por ciudadanos checos, conservando muchas de ellas su fisonomía original.
En el año 1998 fue incorporada a la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Este hecho disparó el turismo en la pequeña aldea checa.
Las viviendas, en las que se alojan aproximadamente 150 habitantes, responden a la arquitectura barroca rural. Cuentan con dos o tres alturas, tejado a dos aguas con frontón triangular, aunque destacan los ejemplos con perfiles curvos. Las fachadas están estucadas en blanco y los remates pintados en tonos rojizos. Algunas fachadas lucen el año de construcción de la vivienda.
Holašovice ofrece los atractivos de las regiones de la Bohemia, como sus paisajes y sus tradiciones culturales. Además cuenta con su propio “Stonehenge”, un círculo de piedras situado en la parte alta de la villa.
A pocos kilómetros de allí, también se puede visitar el Castillo de Český Krumlov.